El Hígado:
Si no sabes
poner límites en tu vida, se producirá una enfermedad hepática.
La hepatitis en
fase jupiterina tiene una fase de expansión, que es donde se produce la
hepatomegalia (aumento de tamaño del hígado). Y se debe a una falta de límites
en nuestras acciones. Los microorganismos implicados son otro estamento más de
la causa, pero no el principal eslabón.
El hígado
almacena el glucógeno, que es de donde se produce nuestra energía. Por eso, las
patologías del hígado cursan con cansancio y conlleva a reducir actividades en
tu vida.
La vesícula, a
pesar de estar en contacto directo con el hígado, está regida por la fuerza de
marte. La litiasis biliar (piedras en la vesícula), corresponde a Saturno, que
explica las concreciones, los límites. Así que en esta patología habría un
problema entre marte (el guerrero) y Saturno (los límites). Y trascendiendo a
la causa primera, se debería a una decisión no tomada.
El Páncreas:
Una de las enfermedades
más relevantes del páncreas es la diabetes. Uno de los principales problemas de
los diabéticos es que les cuesta más trabajo aceptar las normas, la restricción.
La Diabetes
Mellitus tipo II, la que padecen la mayoría de los adultos, se relaciona con
excesos, como los alimentarios y se soluciona poniendo límites.
Cómo armonizar la fuerza Jupiterina:
Para tratar la
raíz del problema es importante llegar al origen, y en este caso, la virtud que
armoniza al hígado es la paciencia. Por lo que, aumentando ésta misma, podemos
controlar la desarmonía producida.
Plantas amargas
útiles en el tratamiento: el cardo mariano (muy importante), el muérdago
(además con gran acción antitumoral), la achicoria (se puede utilizar como
sustituto del café), la alcachofera, el boldo, la hierba hepática, la uña de
gato, el ajenjo o el rabo de gato.
Las hierbas
amargas tomadas antes de comer tienen una función colagoga pues ayudan a
eliminar bilis, así que producen hambre y se pueden considerar aperitivas. Si
se toman después de comer se convierten en digestivas y ayuda a que no aparezca
distensión abdominal.
Oligoelementos:
se puede utilizar la diátesis Zinc-Niquel-Cobalto
Flores de Bach:
Holly y Walnut
Gallexier es un
tónico hepático que puede tomarse antes de las comidas para aumentar el apetito
o después de las mismas para mejorar la digestión.
El jengibre y el
regaliz tienen, entre otras funciones, la de armonizar el hígado.
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